Obtuvo un beneficio neto de 9,4% y confía con cerrar en el tercer trimestre la adquisición de GIP, uno de los principales inversores independientes en infraestructuras del mundo.
La gestora de fondos BlackRock cerró el segundo trimestre de 2024 con un beneficio neto atribuido de 1.495 millones de dólares, lo que equivale a un incremento del 9,4% en comparación con el año pasado, según informó la compañía, que cerró el trimestre con activos gestionados por importe récord de 10,64 billones de dólares, el equivalente a una tercera parte del PBI de Estados Unidos.
De este modo, los activos bajo gestión de BlackRock aumentaron entre abril y junio en más de 170.000 millones de dólares respecto de los primeros tres meses de 2024 y en 1,22 billones de dólares en comparación con el mismo trimestre de 2023.
La relación con Argentina
BlackRock es un viejo conocido de la Argentina, al punto que quizá es uno de los pocos lugares del mundo en donde se los conoce más allá de los especialistas en inversión. Durante su segunda presidencia, Cristina Kirchner acuñó la consigna Patria o Buitres en plena pulseada por intereses de deuda con el fondo que el gobierno no estaba dispuesto a pagar, hasta que Mauricio Macri canceló la deuda con todos los tenedores privados en litigio con el país en su primer año de gobierno y pagó algo más de 9.000 millones de dólares.
En febrero de este año, el presidente y consejero delegado de la gestora y considerado como el hombre más poderoso de la Bolsa mundial, Larry Fink, se reunió con Milei via Zoom y anunció que visitaría la Argentina en mayo, algo que finalmente no ocurrió, aunque el fondo invirtió unos 2.000 millones de dólares en Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre (Bopreal) de la Serie 1 que ofreció el Banco Central, una cifra simbólica, que resultó en un «espaldarazo».
Aunque también manfestó interés durante el gobierno de Macri e incluso en el de Alberto Ferández, en el encuentro virtual, Fink aseguró que tiene «interés» en conocer las oportunidades de negocios que tiene el país para dar. Luego, la empresa afirmó que la visita en los próximos meses será para «discutir posibles inversiones en infraestructura para nuestros clientes junto con inversores locales».
BlackRock tiene acciones en empresas argentinas como Pampa Energía, YPF, Banco Macro, Mercado Libre, Tenaris, Grupo Galicia, Telecom, Transportadora Gas del Norte, Arcos Dorados y Adecoagro; y sigue siendo el principal acreedor privado, con títulos de deuda argentina.
Las ganancias de BlackRock
En el segundo trimestre, el fondo de inversión más grande del mundo contabilizó entradas netas por importe de 81.565 millones de dólares, lo que implica un crecimiento del 6,7% en un año y eleva a unos 139.000 millones de dólares, las entradas en los seis primeros meses del año.
En este sentido, en el primer semestre de 2024 la entidad obtuvo un beneficio neto atribuido de 3.068 millones de dólares, un 21,6% más que en la primera mitad del año anterior.
A su vez, la cifra de negocio de BlackRock sumó hasta junio un total de 9.533 millones de dólares, un 9,5% más, incluyendo un crecimiento del 7,7% en el segundo trimestre, hasta los 4.805 millones de dólares.
«BlackRock generó casi 140.000 millones de dólares de entradas netas totales en el primer semestre de 2024, incluidos casi 82.000 millones de dólares en el segundo trimestre, lo que resultó en un crecimiento orgánico de las tarifas base del 3%», señaló Fink, destacando que el crecimiento orgánico estuvo impulsado por los mercados privados, la renta fija activa minorista y los crecientes flujos hacia los ETF, que tuvieron el mejor comienzo de año registrado.
BlackRock comprará GIP en el tercer trimestre
Por otro lado, el ejecutivo indicó que la entidad está en camino de cerrar la adquisición de Global Infrastructure Partners (GIP) «en el tercer trimestre de 2024», con la que se espera duplicar las tarifas base de los mercados privados y agregar aproximadamente 100.000 millones de dólares (91.691 millones de euros) en activos de infraestructura bajo gestión.
Fundada en 2006, GIP, uno de los principales inversores independientes en infraestructuras del mundo, gestiona más de 100.000 millones de dólares en activos de clientes en capital y deuda en infraestructuras, con especial atención a la energía, el transporte, el agua y los residuos, y digital.
BlackRock anunció el pasado mes de enero la compra por 12.500 millones de dólares (11.461 millones de euros) del fondo GIP, operador de los aeropuertos de Gatwick, Edimburgo y Sídney, entre otras infraestructuras.
«Creemos que la expansión de la infraestructura digital seguirá acelerándose, a medida que los gobiernos prioricen la autosuficiencia y la seguridad mediante el aumento de la capacidad industrial nacional, la independencia energética y la deslocalización (o casi deslocalización) de sectores críticos. Los responsables políticos no han hecho más que empezar a aplicar incentivos financieros de una generación para nuevas tecnologías y proyectos de infraestructuras«, afirmó Fink en enero.