Argentina es uno de los países de la región con menor penetración del crédito. Para que se revierta, bancos deberían recibir más depósitos y ese capital debería ser destinado al sector privado
El crédito privado en Argentina es uno de los más bajos de la región. Pero el Gobierno de Javier Milei espera reactivarlo, y que sea uno de los motores que impulsen el crecimiento económico del país. Pero para ello, deberá lograr controlar la inflación, terminar de ordenar las variables macro y que repunte el nivel de actividad.
Aun así, si todo eso ocurre, se abre el interrogante respecto del acompañamiento de la demanda. “En el corto plazo, depende de la velocidad de recuperación de la economía nacional. Por ahora, no se observan motores que generen un gran boom. El contexto externo no es tan beneficioso como lo fue en otras épocas. Tampoco habrá un impulso fiscal, dada la política de sanear las finanzas públicas”, señaló un estudio deFundación Mediterránea.
A su vez, el trabajo sostuvo que, en el mediano plazo, “si se logra una menor inflación, y la política económica permite una mayor actividad privada, se darían las condiciones necesarias para un crecimiento económico sostenible en el tiempo, que vendría apoyado por más financiamiento bancario”.
Qué sectores se beneficiarían, si crece el crédito
“Los sectores que usualmente toman más créditos son la industria, el agro y el comercio, y en forma indirecta (cuando son sus clientes los que perciben los préstamos), la construcción”, manifestó el informe.
En cuanto a las perspectivas de esos sectores, el análisis consideró que se espera un mejor 2024 para el agro, especialmente pampeano. “En los otros sectores, el panorama viene complicado, especialmente por la fuerte caída en el poder de compra de la población”, indicó y aseguró que “quedan a la espera de un repunte económico”.
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“En cambio, a favor, está el sector energético, beneficiado con la recuperación tarifaria, y que periódicamente requieren inversiones”, manifestó.
De ese modo, el informe sostuvo: “Comparándonos con una economía más estable y con mayor financiamiento, como Chile, nos caracterizamos, no sólo por el bajo nivel de créditos, sino además por estar más concentrado en el consumo. En el mediano plazo, es posible que aumenten en mayor proporción los créditos destinados a empresas y los hipotecarios”.
En cuanto a los costos de los préstamos, evaluó que “son altas las alícuotas del impuesto a los ingresos brutos en varias provincias”. Por el lado de las tasas, añadió “está el UVA, que ha generado problema, porque los salarios se han rezagado notoriamente con respecto a la inflación”.
“También está la incertidumbre de las tasas, si desaparece el cepo, que posiblemente eleve las tasas de los préstamos”, resaltó Fundación Mediterránea.
Cómo podrían crecer los créditos en Argentina
“Argentina es un país de muy bajo crédito bancario (7% del PBI, vs un 84% en Chile)”, analizó Fundación Mediterránea (otras mediciones privadas ubican al crédito en niveles todavía inferiores, en torno al 4% del producto). De acuerdo con la perspectiva de Fundación Mediterránea, para incrementar ese crédito, se deben cumplir dos condiciones: que los bancos reciban más depósitos (así tienen más fondos para prestar), y que los destinen al sector privado.
En ese sentido, puntualizó: “Eso es lo que no ha ocurrido en los últimos seis años”. “Con oscilaciones, los depósitos en pesos, netos de inflación, han estado estancados, con una fuerte caída en los últimos meses. Por otro lado, esos pocos fondos se habían destinado en forma creciente a financiar al gobierno nacional, vía letras del Banco Central”, apuntó.