Lo que tienen que hacer los trabajadores autónomos es construir una cartera de inversión compuesta principalmente por obligaciones negociables que paguen sus rentas en dólares de forma periódica.
Independientemente del rubro al que pertenezcan, los monotributistas suelen tener menos “beneficios” que los empleados en relación de dependencia, entre los cuales se encuentra el aguinaldo. Por lo tanto, si quieren cobrar este ingreso extra dos veces al año, deben tomar sus propias medidas.
Básicamente, lo que tienen que hacer los trabajadores autónomos es construir una cartera de inversión compuesta principalmente por obligaciones negociables (ON) que paguen sus rentas en dólares de forma periódica.
Los especialistas de Cocos Capital recomendaron armar un portafolio con sólo cinco ON para que los monotributistas puedan “saber de antemano cuándo y cuánto van a cobrar e incrementar sus ingresos de manera gradual y planificada”.
En concreto, los activos a comprar serían YPCQ, de YPF, que rinde un 7,5% anual en dólares y paga semestralmente en junio y diciembre; MGC9, de Pampa Energía, bono que retorna un 7,45% y paga semestralmente en junio y diciembre; y BNA26, un subsoberano de Neuquén garantizado por regalías de Vaca Muerta que rinde un 14% y abona trimestralmente en enero, abril, julio y octubre.
También se debería incluir DNC3, de Edenor, el cual rinde un 8,25% y paga en mayo y noviembre; y BPY26, un Bopreal que rinde un 20% y paga en septiembre, diciembre, febrero y junio. En todos los casos, la amortización es al vencimiento en 2026.
Por su parte, Gonzalo Tassano, asesor financiero en Bull Market Brokers, indicó que se podría hacer una cartera con ON como TLC1, de Telecom Argentina; YMCI, de YPF; y CS37, de Cresud. En promedio, estos activos brindarían un 8% anual en dólares y repartirían rentas en enero, marzo, junio, julio y diciembre.
El problema de estos portafolios “conservadores” es que habría que apostar mucho capital para que repartan el equivalente a un “aguinaldo” dada su tasa de “apenas” el 8%. Por lo tanto, resultaría sensato agregar algo de Cedears del S&P 500 (SPY) o del Dow Jones (DIA), que son índices accionarios muy diversificados y no tan volátiles.
También se le podría sumar el Bopreal BPY26 para tener algo más de rendimiento sin alterar demasiado el perfil de riesgo de la cartera. “Podrías hacer un 50% enfocado a ON, un 20% en Cedears, un 10% en BPY26 y a esto se le puede sumar otro activo dependiendo del riesgo o seguridad que busque el monotributista, ya sea aumentar en Cedears, agregar un GD30 o ir con una acción argentina”, comentó el experto.
En el caso de los bonos soberanos, que en las últimas jornadas subieron fuertemente, vale la pena destacar que a partir de este año finalmente empezaron a pagar cupones más atractivos, por lo que ya no deberían actuar tanto como una “acción” y sí más como un bono propiamente dicho, con menor volatilidad y una mejor proyección de flujo de fondos.
“Estos bonos soberanos pagan amortizaciones de capital y cupones de interés, y lo que más interesa al respecto es que el mercado descuenta que se depositarán en tiempo y forma gracias a la trayectoria macroprudencial del Gobierno. Por lo cual, desde ese lado se podrá obtener una gran rentabilidad, que podría representar un margen de hasta casi 30% en dólares”, estimó Adrián Moreno, economista especialista en mercados financieros.
Por su parte, Maximiliano Donzelli, jefe de Estrategias de Inversión en Invertir Online, apuntó que ve con buenos ojos tomar posición en el GD35. “Desde el equipo de research, seleccionamos este bono soberano que actualmente cuenta con un rendimiento del 17,5% en dólares. Para nosotros, este instrumento presenta perspectivas positivas con la posibilidad de una normalización de la economía”, señaló.
r